lunes, 12 de noviembre de 2012

Y el chocolate espeso.

(Andén de metro)
K-¿Cuanto falta?
(Pausa)
L- ¿Para el siguiente metro?
K- No...(pausa) sabes a lo que me refiero.
L- No se si falta o no falta tiempo. No sé si quiero que estés aquí...
(Pausa)
K-Convéncete tanto como quieras, pero...
L-¿Crees que..?
K-Juegas.
L-Yo no juego con nadie.
K-No no, juegas contigo mismo, juegas tu juego, tu vida. Todos jugamos. Nadie se libra. Pero llega un punto ¿Sabes? Un punto en el que ya no hace falta jugar tanto, ni jugar sucio, ni jugar pensando que se juega limpio aunque se juegue sucio.
L-Te equivocas.
K-No, y no quiero seguir con esta conversación. No es necesario porque si no sabes cuanto falta, en general, para decir basta, voy a ser tal y como soy, sin darle más vueltas...si no lo sabes, no hay mucho que hacer, porque es aburrido pensar qué piensas o dejas de pensar.
L-¿Y tú? ¿Qué piensas?
K-Nadie te ha dicho que gires la tortilla. Aquí la tortilla no se gira. Punto.
L-Sabes que conseguirás que realmente...comportándote así...
K- Me da igual. Me da igual, de verdad. Ya no hago las cosas pensando qué conseguiré, ganaré o perderé. Ha llovido mucho, en mi vida, para que me preocupe tener sitio donde cobijarme. Solo quería saber si verdaderamente sabías si faltaba poco, porque de ser así, quizá, tan solo quizá, me hubiera...
L-Quedan tres minutos, con los recortes los metros pasan con mucho tiempo entre unos y otros.
K-Si. Bien. Tres. Supongo que eso no cambia nada.
L- Es que, es mi vida y la vivo como quiero. Y no sé si..
K- No, nunca sabes nada. Y sí, es tu vida, por supuesto, solo que, a veces, se cruza con otras. No lo olvides.
L.-Ya...
K-No pasa nada. Solo que ten en cuenta, a veces, que podría ser todo más fácil. Por ejemplo, en vez de decirme "no sé si quiero que estés aquí" podrías haberme dicho "me voy ahora" o "vete a la otra punta del andén porque no quiero verte más" las cosas claras son más sencillas.
L-Las cosas claras duelen.
K-Ayudan.
L-No puedo decir algo así.
K-Te lo pido.
L-Pero es que tampoco es lo que pensaba. Ni lo pienso. He dicho "no sé", porque es que es la verdad, no quiero que te vayas, pero tampoco que te quedes...
(LLega el metro)
L- Ya está aquí.
K- Buen viaje.
L-¿Cómo? ¿No subes?...
K-Estaba a punto de equivocarme de dirección.
(L sube, mira fijamente a K, que se gira y anda hacía lo lejos. El metro se pone en marcha)

No hay comentarios:

Publicar un comentario